Amy

(Amy en Campos do Jordao, 2009)

 

Silvina, nombre al que asocio conceptos como criterio, lealtad, profunda sensibilidad, compromiso y sencillez entre muchísimos otros. Escojo estos tal vez porque son los que más me sorprendieron ver tan evidentes al mismo tiempo en alguien tan joven que parecía haber vivido todas (las experiencias posibles). Intensa, pena que más en sus dolores que en sus alegrías.

Llegaste a mi vida tan dispuesta, tan disponible y me quisiste a pesar de todo lo que viste en mí. Nos volvimos entrañables como David y Jonatán. Desde aquel entonces, 8 años transcurrieron y nuestras vidas fueron tomando sus rumbos. Te extraño y lo sabes. Tenías olor a casa, a mi latinidad como yo decía. Fuiste mi amiga del cole y me presentaste a tus amigas, fuimos colegas de trabajo, roomates  y también fuimos familia.

Como caben tantas personas en un cuerpo no más, no lo sé… pero debo decirte que me encanta esa capacidad de la multiplicación, no de panes ni de peces y si de personas, afectos…

En este día, muy especial desde luego, un día en que celebramos la vida, tu vida, deseo que tengas siempre presente que no estás sola y que “sós” para alguien.

Demás está decirte que oro por ti todos los días? Dicen que eso nunca está demás. Y no podría dejar de hacerlo, pues vives en mi corazón. Entonces, todas las mañanas cuando le abro el corazón a Dios, ahí estás tú.

(email que me envio Amy en mi cumpleaños, abril 2012)